El Comité Olímpico Mexicano (COM) reconoció este jueves las trayectorias deportivas de los medallistas olímpicos de 1968, María Teresa Ramírez y Felipe Muñoz, y realizó un homenaje póstumo en memoria de Guillermo Echevarría, recordista mundial en natación, y a Jorge Rueda, entrenador de medallistas olímpicos en la disciplina de clavados.
Destacados deportistas, amigos y familiares de los homenajeados, se dieron cita en la Plaza Olímpica del Centro Deportivo Olímpico Mexicano (CDOM), donde se reconoció la contribución al deporte nacional de estos distinguidos integrantes de la familia olímpica mexicana.
“Jorge y Memo serán recordados siempre en el Comité Olímpico Mexicano por lo que nos dieron, honor y templanza; nos enseñaron a ser personas leales, responsables y comprometidas”, destacó la presidenta del COM, María José Alcalá.
Los medallistas olímpicos María Teresa Ramírez, Jesús Mena y Fernando Platas, entre otros, participaron en este homenaje, en el que recordaron las hazañas olímpicas de los homenajeados y sus trayectorias que dejaron huella en la historia del deporte mexicano.
Andrés Echevarría, hijo de Guillermo Echevarría, y Jorge Adrián Rueda, hijo de Jorge Rueda, se refirieron a la contribución de sus padres en la formación de nuevos deportistas, bajo una mística humanista, de competencia leal, de trabajo arduo y comprometido por México.
Norma Baraldi, dijo a nombre de la Asociación de Medallistas Olímpicos Mexicanos, que los homenajeados siempre dieron lo mejor de ellos para impulsar el deporte nacional y colocarlo en un lugar preponderante en el escenario internacional.
En la ceremonia se develaron placas en honor a María Teresa Ramírez y Felipe Muñoz, así como para recordar la memoria de Guillermo Echevarría y Jorge Rueda, mismas que serán colocadas en la alberca y fosa del Centro Deportivo Olímpico Mexicano.