Texto: Daniel Ríos
En el Apertura 2023 de la Liga MX, la presencia de entrenadores extranjeros en la fase decisiva destaca una realidad innegable: la disminuida representación de directores técnicos mexicanos. Entre las estadísticas no favorables, resalta la figura de Ricardo Carbajal como el único estratega nacional que persiste en la lucha por el título, evidenciando la escasez de liderazgo local en el banquillo mexicano.
El paisaje técnico de la Liga MX en el Apertura 2023 refleja un desequilibrio notorio: nueve entrenadores extranjeros y un solitario representante mexicano, Ricardo Carbajal. Esta diferencia no solo subraya la falta de oportunidades para los directores técnicos locales, sino que también plantea preguntas sobre el desarrollo y reconocimiento de talento dentro del país.
Mientras Carbajal persevera en su travesía, su destacada presencia resalta la necesidad de una reflexión crítica sobre las condiciones y estructuras que limitan la participación de entrenadores mexicanos en roles protagónicos. La tendencia actual sugiere un terreno inclinado hacia la preferencia de estrategas extranjeros, planteando desafíos significativos para el futuro de la dirección técnica nacional.
La situación de Carbajal no solo representa una historia individual de resistencia, sino también un llamado de atención para una introspección colectiva. La escasa presencia de directores técnicos mexicanos en instancias decisivas del torneo subraya la necesidad urgente de revisar y reformar las estructuras que continuan esta desigualdad, si se busca cultivar y nutrir el talento local en el banquillo de la Liga MX.
La posición de Ricardo Carbajal como el único estratega mexicano destacado en la fase final del Apertura 2023 subraya la realidad de la baja representación de directores técnicos locales en la Liga MX. Su travesía se convierte así en un reflejo de los desafíos sistémicos que enfrentan los entrenadores nacionales en un entorno cada vez más dominado por figuras extranjeras.
