Ángela Ruiz quiere construir su propia historia

Con apenas 18 años, menos de dos de ellos como seleccionada nacional mayor, la arquera Ángela Ruiz Rosales ya puede jactarse de ostentar un envidiable palmarés al ser medallista olímpica y mundial, lo cual la ha consolidado como el presente y futuro de su disciplina, una en la que México es considerado potencia mundial desde hace más de una década.

La coahuilense escribió su nombre en las páginas doradas del deporte azteca justo cuando cumplió la mayoría de edad, día en el que ganó la medalla de bronce en París 2024 con Alejandra Valencia y Ana Paula Vázquez, lo que representó la primera presea para el país en la prueba por equipos dentro de su historia en la justa veraniega.

“He aprendido muchísimo y ahora ya sé qué tengo que hacer y no hacer para el siguiente ciclo, dónde me tengo que poner un poco más firme con mis convicciones, decisiones y pensamientos; estos dos años han sido increíbles y no los cambiaría por nada. Ahorita quiero enfocarme en seguir construyendo hacia adelante para siguientes Juegos Olímpicos, Copas del Mundo, Mundiales y Panamericanos.

“A todas esas personas que estuvieron en París, qué confianza nos tuvieron al comprar los boletos hasta la final sin saber si íbamos a pasar o no, muchísimas gracias por el apoyo, nos hicieron sentir como en casa. A los que estuvieron en México, se agradece que se hayan levantado temprano y llorado con nosotros, porque es transmitirles lo que sentimos dentro de la línea en las competencias”, expresó.

Luego de haber tocado el cielo en territorio parisino, la también medallista de bronce en el Campeonato Mundial Berlín 2023 reconoció un cambio radical en su vida al transformarse en una figura mediática, lo cual ha tratado de afrontar con mesura y responsabilidad, incluso posponiendo un anhelado reencuentro con su familia.

La vida nueva que tengo es emocionante, pero también cansada. Tenemos una agenda de aquí a octubre, ya para noviembre descansar con mi familia, a la que no he podido ver porque quiero se baje todavía un poquito esto y me vean también como persona, no solo como atleta. Es una línea muy delgada que a veces se puede perder porque todo lo pones para el deporte, ¿y dónde queda la persona?«, señaló.

Consciente de que pese a su corta edad ya es un modelo a seguir para las nuevas generaciones nacionales, la subcampeona de la Copa del Mundo Medellín 2023 consideró que los que vienen detrás de ella deben superar a los deportistas de la actualidad y no perderse en tratar de ser igual a un ídolo.

“Ojalá las nuevas generaciones sean mejores que yo, eso es lo que se busca. El idolatrar a una persona te pierde también a ti con lo que quieres porque buscas lograr lo de la otra persona en vez de hacer tu camino; es la convicción con la que veo yo en ir por mi camino, porque sí se ha logrado mucho, pero quiero hacer y escribir mi propia historia».